martes, 8 de junio de 2010

Octavo día de clase práctica

Hoy, en el último día de clase, tras llevar dos semanas sin clase teórica por los siguientes motivos: el 1 de junio por una reunión del Departamento de Didáctica de la Lengua y la Literatura, y el 8 de junio por la escasez de tiempo para que termine el curso, la huelga y la realización de entrevistas personales, es decir, exámenes orales; hemos concluido la asignatura con una clase práctica, la octava de la materia, la cual se ha basado, principalmente, en la autoevaluación de los alumnos asistentes.

Dicho esto, la clase comenzó con la exposición del compañero Jonathan sobre el libro de “Gramática de la fantasía”, en la cual nos comentó las ideas más importantes y sus conclusiones personales.

Luego, el profesor, Raúl, hizo varios comentarios sobre el transcurso del curso y nos comentó sobre todo el grado de mejora en las exposiciones. Y con esto, pasamos a la actividad principal de hoy, que consistía en la autoevaluación respecto a esta asignatura de todos los estudiantes presentes.

Mi autoevaluación, como bien dije en clase, decía lo siguiente: Yo creo que he llevado en trabajo de la asignatura al día a día al 100%, es decir, el blog, las cuestiones, el cuento, la lectura...; ya que como bien me considero, soy una persona muy responsable y muy constante en estos aspectos. Respecto a la asignatura en general, pienso que nos ha servido de gran ayuda y no solo por el temario dado, sino como lo hemos dado, ya que el profesor nos ha dado ejemplo con su forma de dar las clases, es decir, las exposiciones, la lectura, el cuento, las entrevistas, el blog..., de cómo llevar a la práctica todos los contenidos que hemos adquirido. Y por último, pues pienso que lo que mas me ha costado de la asignatura es la expresión oral debido a mi timidez y a mis nervios, pero a lo largo de este cuatrimestre he observado que he mejorado mucho respecto a este tema. Y lo que más fácil o entretenido me ha parecido ha sido la expresión escrita ya que es la destreza que mejor se me da, además de escuchar.

Después, para concluir, el profesor se despidió de nosotros y nos avisó de que para la primera semana de julio tendremos a disposición las esperadas y deseadas calificaciones.

Y por último, para despedir la asignatura, al profesor y este blog, al que al final tras estar liado un cuatrimestre con él le coges cariño, sólo me gustaría dar las gracias a Raúl por enseñarnos a cómo se debe tratar a un alumno, cómo saber llevar un aula, por su forma de entender la enseñanza y por crear ese ambiente entre todos nosotros, el cual nos ha facilitado la comunicación, el desarrollo de la asignatura y la confianza en nosotros mismo.

Todo esto parece un poco de peloteo, pero en verdad lo he pensado todo el cuatrimestre, porque nunca me había encontrado con un profesor que entienda la enseñanza de la lengua de tal forma y encima dando el temario con una metodología ejemplar a seguir como futuro docentes. Así, pienso que los resultados de está materia serán mejores que en otras muchas asignaturas ya que pienso y creo en la siguiente frase:

Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo.

Y tú, Raúl, nos has sabido involucrar a todos y cada uno de nosotros, siendo todos diferentes, y por lo tanto hemos aprendido. Dicho todo esto, creo que los has conseguido y has alcanzado tus objetivos, y de este modo, que nosotros alcancemos los nuestros propios, porque te gusta lo que haces, también te involucras y aprendes enseñando.